Desrotular vehículos consiste en retirar el vinilo que anteriormente se había instalado.
Se pueden dar por varios motivos, como por ejemplo por deterioro del material, por una mala instalación o simplemente porque la publicidad quede obsoleta y quiera cambiarse.
Para retirar un vinilo y que no nos provoque mucha dificultad normalmente usaremos un decapador o una pistola de calor. Se despega una punta del vinilo y se empieza a tirar.
Si el vinilo está en buen o medianamente en buen estado, saldrá con ese calor sin mucha dificultad. Si el vinilo está en muy mal estado costará bastante más retirarlo. Aquí tendremos que armarnos de paciencia… Los trozos no saldrán completos, se rompen o cuartean con mucha facilidad y dejarán un residuo de vinilo muy molesto.
En este caso deberemos optar por usar líquidos especiales que nos ayuden a retirar ese residuo y respeten la carrocería del vehículo.
Hay desrotulaciones que pueden costar más que la propia instalación. Una vez retirado el vinilo la carrocería debe quedar como el vehículo estaba al principio antes de hacer la instalación.