Una rotulación integral consiste en rotular o «tapar» el vehículo entero.
El material más usado es el vinilo de fundición ya que tiene la capacidad de poderse moldear y, dándole el calor adecuado, el vinilo se adapta a las superficies curvas donde otros vinilos no pueden.
Una rotulación integral consiste en vinilar desde partes pequeñas del vehículo como retrovisores, manetas, embellecedores, hasta partes más grandes como paragolpes, puertas, maleteros o capós. También puede consistir en un cambio de color o en cubrir el vehículo con una imagen o imágenes (vinilo de impresión) que es el que se suele usar para dar vistosidad a una flota y así poder promocionar la marca de la empresa.
El precio de la rotulación integral puede costar desde los 800€ para vehículos pequeños hasta los 2000€ aprox. para vehículos más grandes y largos.